En una sociedad tan cambiante el futuro es más incierto que nunca, por eso en nuestro Colegio educamos de forma innovadora y siempre al día en las últimas tecnologías y estrategias educativas trabajando para dotarles de autonomía y de herramientas que les permitan obtener un perfil de salida con el que puedan adaptarse a esa realidad del futuro. Un futuro en el que cada vez se valorará más las habilidades cooperativas y la inteligencia intra e interpersonal.
OBJETIVO EDUCATIVO
LEMA CURSO 2025-2026
El lema “Abiertos al mundo” nos invita a dirigir nuestra mirada y nuestra acción hacia afuera, centrada en el cuidado de todo lo creado mediante la apertura al mundo y una ética del cuidado.
Este lema va más allá de nuestro propio bienestar o entorno cercano. Implica reconocer nuestra conexión con el planeta y la humanidad, una llamada a la responsabilidad hacia toda la creación y su diversidad, adoptando una ética del cuidado que abarca lo físico, social y global.
Esta apertura se manifiesta en la comunidad educativa a través de diversas actitudes y acciones:
- Conciencia global: Desarrollar una comprensión profunda de los desafíos y realidades del mundo actual, incluyendo la desigualdad, la sostenibilidad ambiental, la justicia social y la diversidad cultural.
- Valoración de la diversidad: Celebrar la riqueza de las distintas culturas, perspectivas y formas de vida presentes en el mundo, promoviendo el respeto y el diálogo intercultural.
- Responsabilidad ecológica: Impulsar iniciativas de cuidado del medio ambiente, reconociendo nuestra interdependencia con la naturaleza como parte de “todo lo creado”.
- Solidaridad y compromiso: Fomentar la empatía y la acción solidaria hacia quienes lo necesitan en cualquier parte del mundo, así como el compromiso con causas que promueven un mundo más justo y humano.
- Proyección del cuidado: Extender la “cultura del cuidado de la vida en todas sus dimensiones” (cuidado personal y cuidado de las relaciones) hacia el cuidado del entorno y del mundo.
En el contexto de la escuela, ser “Abiertos al mundo” significa crear un ambiente que fomente la curiosidad y el aprendizaje sobre otras realidades, en que se viva la diversidad como fuente de enriquecimiento y se fomente la participación en proyectos de servicio a la comunidad y la reflexión crítica sobre nuestro papel en el mundo. Es preparar a los alumnos, y a toda la comunidad, para ser ciudadanos globales responsables y comprometidos que contribuyan activamente al cuidado y la transformación positiva del mundo.
DESDE UNA MIRADA CREYENTE
Cuando nos acercamos a nuestro mundo con mente y corazón abiertos, descubrimos la diversidad como manifestación divina y fuente de riqueza, pues Dios creó y bendijo cada a cada ser como único: “Y vio era bueno”. Vivir “Abiertos al mundo” es reconocer la presencia de Dios en toda la creación, invitándonos a encontrarle más allá de lo personal, en la riqueza global y en cada individuo.
Reconocer a Dios como Creador y a nosotros como sus colaboradores implica la responsabilidad de cuidar a todos los seres, valorando la dignidad de cada ser humano como hermano. Esto se traduce en una mirada compasiva hacia las necesidades globales y un firme compromiso con la justicia social.
Como comunidad educativa, orientada a la búsqueda del sentido de la vida, nuestro lema “Abiertos al mundo” nos impulsa a reflexionar cómo nuestra vocación nos mueve a servir, cuidar y transformar el mundo con nuestros talentos. Este curso nos brinda la oportunidad de profundizar en nuestra interconexión con todo lo creado y a asumir la responsabilidad que esto conlleva.
El universalismo de Cándida María de Jesús sigue inspirándonos. Era una mujer “abierta al mundo”, para ella no existían fronteras geográficas ni sociales para la misión de educar y así transformar el mundo; anhelaba que su congregación llegara a cada rincón, pues el mundo era “pequeño para sus deseos”. Su visión se concretó en una educación para todos, sin distinción, invitándonos hoy a una apertura constante donde la diversidad enriquece y la educación construye un mundo más justo y compasivo.
PERSONAS AUTÓNOMAS, CREATIVAS Y COMPROMETIDAS
Hay una pregunta de fondo que nos acompaña a la hora de establecer nuestra propuesta educativa: ¿Qué tipo de persona queremos educar? Son tres las palabras que nos gustaría que acompañasen a nuestro alumnado al haber terminado su etapa escolar en Jesuitinas: autonomía, creatividad y compromiso.

Las personas autónomas, creativas y comprometidas son personas:
PILARES PEDAGÓGICOS
¿Qué competencias debe adquirir un alumno del siglo XXI?
Las esenciales son la colaboración, la solución de problemas, el espíritu emprendedor, perseguir intereses propios, tener espíritu crítico y desafiar las convenciones. El sistema debe preparar a los jóvenes para que se adapten a un mundo en constante cambio, para que sean más lanzados e independientes, que tengan más control sobre sus vidas y colaboren entre ellos para encontrar soluciones a los problemas. (RICHARD GERVER)
Podemos decir que las nuevas propuestas educativas están alineadas con el estilo educativo de los colegios de la Fundación Educativa Jesuitinas. Siguiendo los documentos Nuestro Modo Propio de Educar y el Carácter Propio de las Hijas de Jesús, encontramos conexiones muy interesantes que apoyarán una práctica educativa coherente:
- “Formar miembros útiles para la sociedad y para la Iglesia”
- “Educar a la Entera Persona»
- Atención a todos los educandos, pero “sobre todo a los más necesitados”
- “Desarrollamos el sentido crítico”
- “Favorecemos y valoramos la creatividad”

Intuición pedagógica de la M. Cándida
Este Manual Pedagógico pretende conseguir que nuestros alumnos lleguen a ser autónomos, creativos y comprometidos. Es por eso que trabajaremos en tres direcciones:
ACCIÓN EVANGELIZADORA

La acción evangelizadora del colegio está en el enfoque de la educación integral que damos a nuestros alumnos y se realiza explícitamente a través de actividades como la reflexión de la mañana, las sesiones de tutorías, celebraciones no sacramentales, la eucaristía de los miércoles, las clases de religión y talleres.
Los colegios de Jesuitinas son centros de identidad cristiana católica
Queremos cooperar en el proceso de crecimiento y maduración de hombres y mujeres que pueden llegar a ser miembros útiles en la sociedad, en la Iglesia y en la familia, y personas capaces de servir y amar a todos, especialmente a los más necesitados.
Buscamos que en nuestros centros haya una comunidad educativa cristiana que sea referencia y en la que haya una oferta de actividades pastorales que permitan el descubrimiento y la toma de opciones personales.
Nuestro deseo es que cada persona, respetando las creencias y la trayectoria singular de cada uno, pueda hacer su propio camino de crecimiento en su dimensión espiritual y de conocimiento y seguimiento de Jesús.
Cada persona es única e irrepetible. También su camino de crecimiento personal y en la fe. Nuestro deseo es contribuir a la educación íntegra de nuestro alumnado, también en su dimensión espiritual y trascendente.
Esta educación espiritual no es un contenido de un área de conocimiento, sino que está presente en todos los ámbitos de la vida escolar.
Por eso, ofrecemos una oferta pastoral diversa, con propuestas para que cada persona pueda ir haciendo su camino, desde el momento vital en el que se encuentra y desde sus propias preferencias personales. Es una oferta pastoral basada en itinerarios (convivencias, taller de oración, catequesis, grupos de fe, itinerario de compromiso social…) y experiencias
que desean dar respuesta a los interrogantes más profundos, permitiendo el descubrimiento y la toma de opciones personales.
En cada uno de esos itinerarios buscamos alimentar los elementos sobre los que pivota el crecimiento en la fe de una persona: la interioridad, el encuentro con Jesús y el compromiso. Y todo ello desde una acción evangelizadora innovadora, actualizada en sus contenidos, canales, formas de comunicación, una pastoral rica en el uso de diferentes lenguajes y símbolos.
El fundamento de nuestros colegios es ser plataformas evangelizadoras que ofrezcan la oportunidad para un encuentro personal con Jesús, siempre desde el respeto de las propias creencias y el ritmo de cada persona.
Nuestros colegios están impregnados de valores evangélicos y en ellos queremos que crezca una comunidad educativa cristiana que sea referencia, que viva, celebre y se forme en su fe, desde un subrayado carismático, desde un modo de ser cristiano según el carisma de la Madre Cándida: con una confianza plena en Dios Padre que de todos cuida, abiertos al mundo donde todos tienen cabida, sintiéndonos hijos en el Hijo lo que nos lleva a reconocernos como hermanos.
Nuestras raíces beben de la espiritualidad ignaciana, lo que nos impulsa a vivir desde un profundo sentimiento de agradecimiento por todos los dones recibidos, nos hace conscientes de nuestras debilidades y nos aporta claves que transforman nuestras relaciones convirtiéndonos en personas que enfocan su vida hacia los demás.

Los talleres de oración, cada uno a su nivel , pretenden ayudar a nuestros alumnos a serenarse, hacer silencio para encontrarse con la persona de Jesús a través de distintos modos de orar preferentemente con los evangelios.
También queremos que aprendan a dar gracias a Dios y pedir su ayuda, para ir siendo mejores personas, compartir la fe con
gente de su edad perdiendo el miedo al qué dirán y manifestar con respeto y libertad sus creencias.
Responde al Itinerario de Convivencias realizado para todos los colegios de las Hijas de Jesús de España. Están programadas y secuenciadas según las distintas edades con contenidos que ayuden a la educación integral de nuestros alumnos, desarrollando en ellas todas las dimensiones de la persona y las Inteligencias Múltiples en las que incluimos la Inteligencia Espiritual.

El Colegio ofrece la oportunidad de ir creciendo en la fe. El proceso se inicia con la preparación a la Primera Comunión, a través de la Catequesis Familiar, ya que es la familia quien toma la decisión de educar en la fe a sus hijos. Tiempo de formación, de reflexión también para los padres, que son los principales catequistas.
Continúa cuando uno se integra en ALCOR, que es el grupo de formación cristiana de los Colegios de las Hijas de Jesús.
Y culmina con la preparación al sacramento de la Confirmación, que compromete a ser cristiano adulto, integrándose en la comunidad.
Es el grupo juvenil cristiano de las Hijas de Jesús. Está presente en la mayor parte de los colegios de la Fundación. A través de una dinámica de juego, reflexión, oración y compromiso sus miembros buscan responder a la llamada hecha por Jesús de poner su persona al servicio de los otros. Además de las actividades semanales organizadas por los monitores, y que contribuyen a impulsar el proceso de desarrollo de una persona creyente, a lo largo del curso se organizan convivencias intercolegiales, rutas de senderismo, actividades sociales, encuentros de monitores, jornadas de formación y campamentos de verano.
El grupo, que surge en los años 80 y se consolida en la década de los 90, recibe su nombre de la estrella Alcor. Sólo quien tiene una buena agudeza visual puede distinguirla en la Osa Mayor. Su símbolo es una estrella, que tiene amplias resonancias en la Congregación de las Hijas de Jesús, recordando a María, a quien la Madre Cándida puso como “estrella de nuestros caminos”. Su signo de pertenencia, una pañoleta azul.
Desde la experiencia y el sentido de comunidad, Alcor potencia una forma de ser, de vivir, de manifestarse y de comunicarse y que lleva a comprometerse con la transformación de la realidad ofreciendo un testimonio cristiano y coherente con los valores de este grupo.
El Grupo ALCOR nace en los colegios de las Hijas de Jesús. Pretendemos, desde pequeños, ir madurando como personas y como cristianos: creciendo en grupo, pareciéndonos a Jesús, comprometiéndonos con la Iglesia para hacer un mundo mejor. Nos organizamos en grupos y cada grupo, dividido por edades, tienen una reunión formativa con sus monitores correspondientes.
La Pastoral Juvenil Vocacional (PJV) es una de las dimensiones de la acción apostólica de las Hijas de Jesús. La Congregación General XVIII nos la ha presentado como una “Llamada en la acción apostólica” para toda la Familia Madre Cándida.
Jóvenes FI son todos aquellos que, por algún motivo, tienen alguna vinculación con las Hijas de Jesús o con el carisma de Santa Cándida. Este grupo, nacido en el curso 2018-2019, lo forman jóvenes, de 18 a 35 años, y adultos (Hijas de Jesús y laicos) que les acompañan en su proceso personal y de fe.
Participan en experiencias organizadas por las Hijas de Jesús: campos de trabajo, Pascuas, retiros, Ejercicios Espirituales, voluntariado… Son profesores o antiguos alumnos de los colegios de la Fundación Educativa Jesuitinas (FEJ). Son monitores de Alcor, colegialas de los colegios mayores, jóvenes de parroquia… Son personas que se sienten identificadas con el modo de vivir el evangelio según el carisma de santa Cándida y los protagonistas de esta Pastoral que pone en el centro a los jóvenes.
Pretende desarrollar la dimensión de compromiso social y de trabajo por la justicia que brota de la fe. Se realiza mediante una tarea de sensibilización y colaboración de toda la Comunidad educativa en campañas como el DOMUND, Cáritas (Navidad) , Manos Unidas, FASFI etc.
El equipo de Acción Social se ocupa de las campañas solidarias del colegio. Que habitualmente son:
- Pasaje del terror y campaña solidaria.
- Operación Kilo en Navidad.
- Bocata solidario.
- Carrera solidaria de Fasfi.
- Fotos de las clases. Destinado a FASFI.
El proyecto de FASFI elegido para este curso es:
“Agua para todos”, Malawi, Mtendere.
Mejorar la accesibilidad a fuentes de agua potable para los habitantes de la zona de Chisambo. Sustituir las fuentes de extracción de agua poco saludables por un pozo que reduzca el número de pacientes con dolencias derivadas de la ingesta de agua en malas condiciones.
El equipo se encarga también de contactar con algunas asociaciones, ONG’s o Fundaciones solidarias, que vienen al colegio a dar charlas con los alumnos mayores, para dar a conocer las acciones que realizan: Cáritas, Proyecto Hombre, San Juan de Dios…


Pretendemos desarrollar el diálogo fe-cultura a través de la religiosidad popular, tan rica en nuestra tierra, donde se unen la cultura y la fe y tiene su máxima expresión en la Semana Santa.
Es un proyecto abierto a toda la comunidad educativa pero fundamentalmente a los alumnos para que su sensibilidad religiosa vaya creciendo y madurando influyendo en su vida y compromiso cristiano.
La procesión del Viernes de Dolores por el colegio, abierta a todo el barrio y colegios de la zona, queremos que sea la expresión externa de una honda vivencia interna de la fe en Jesús Resucitado.
Programación de actividades de acción evangelizadora (25-26)
OBJETIVO DEL CURSO
Asumimos el lema de la Fundación Jesuitinas: “Abiertos al mundo”, que trabajaremos en la medida de lo posible, en toda la comunidad educativa.
Para llevarlo adelante buscaremos y elegiremos lo que más nos ayude a crecer como:
- Escuela que evangeliza educando a nuestros alumnos como personas cada vez más autónomas, comprometidas y creativas.
- Escuela que educa y enseña a sus alumnos a tomar buenas decisiones asumiendo sus consecuencias.
- Comunidad educativa animada por una comunidad cristiana que se hace visible en distintos momentos (Encuentros de oración y formación, eucaristías, etc.).
- Escuela que cree en la innovación pedagógica como servicio a nuestros alumnos, a la sociedad y a la Iglesia.
- Un equipo formado por educadores que explícitamente evangelizan desde los diferentes grupos creados para este fin.
CELEBRACIÓN DE LA EUCARISTÍA (dirigida a todos los miembros de la comunidad educativa)
Cada miércoles, a las 8’15 de la mañana, se celebra la Eucaristía en el colegio. Cada día asisten y participan dos clases de Secundaria del colegio y dos cursos de primaria, aunque está abierta a todos los que quieran asistir.

LAUDATO SI
En la fiesta de Pentecostés del año 2015 el Papa Francisco publicó su Carta encíclica Laudato Si’ sobre la ‘ecología integral’. Francisco manifestó expresamente que los destinatarios de su Carta son todos los hombres y mujeres de buena voluntad que están preocupados por el medio ambiente y la salud del planeta, de todos los países del mundo. Además, manifestó que le gustaría que el contenido de esta Carta fuera objeto de diálogo e incluso de debate.
En respuesta a la llamada que nos hacen las Hijas de Jesús, la Fundación Jesuitinas en general y el Colegio Gamarra en particular, nos hemos embarcado en plasmar de manera duradera y concreta la encíclica Laudato Si’.
Buscamos juntos cómo dar respuesta a la llamada del Papa Francisco de conversión ecológica integral desde nuestra labor de educadores en el sentido amplio de la palabra. El medio ambiente no se había entendido por lo general desde su significado moral, pero esto está empezando a cambiar. Entre las comunidades de creyentes, el simple hecho de pasar de hablar de “medio ambiente” a hablar de “creación” evidencia que la Tierra no es algo pasivo, sino que tiene un carácter sagrado y que es de Dios.
TUTORÍA Y ORIENTACIÓN
Pendiente

